Orange Is the New Black: temporada 3

Título: Orange Is the New Black

Temporada: 3

Episodios: 13

Año: 2015

Productora: Netflix

Emisión en España: Canal +
Categoría: Series, Drama, Comedia

Vuelve una tercera temporada de las reclusas de moda con más emociones, líos y trapicheos en la prisión de mínima seguridad de Litchfield. La nueva temporada consta de trece episodios de una hora, como Netflix ya nos tiene acostumbrados. En ellos se vuelven a adentrar en las vidas y emociones de las presas, recordándonos una vez más que antes de ser criminales son personas con historias.

Esta temporada tiene de todo, ya que nos muestra momentos muy íntimos entre las reclusas, nuevas amistades que nunca se te pasaron por la cabeza, personajes nuevos, más drama entre Piper y Alex, y un poco de adrenalina, que siempre viene bien. No obstante, la primera parte de la temporada es bastante tranquila, tanto que a veces llegamos a olvidar que estamos viendo una serie sobre una cárcel, por tanta relación cordial que las protagonistas se traen. Quizás sea por todo el tema de Vee de la segunda temporada, pero lo cierto es que se echa un poco de menos ese ambiente agresivo que solo se deja ver en los últimos capítulos.

    

Esta es Stella (Ruby Rose),

 la nueva reclusa de la 

que todo el mundo habla.

Pero dejando todo eso a un lado, Orange Is the New Black nos demuestra una vez más por qué es una de las mejores series de televisión en antena. La profundización que se hace en los personajes durante los trece episodios, así como su desarrollo psicológicos, son, quizás, más fuertes que nunca. Además, se perfilan ciertos matices de carácter que hasta ahora quedaban prácticamente ocultos en algunos de los personajes, y por supuesto, no podían olvidarse de esas decisiones repentinas e irresponsables que nos invaden a todos y que en muchas ocasiones se crean por el miedo a lo que nos rodea, por la presión y la inseguridad y que afectan en mayor o menor medida a los personajes. Todo ello se ve excepcionalmente desarrollado, con toques de humor y drama que reflejan la vida misma.

En definitiva, la tercera temporada de Orange Is the New Black no es tan intensa como sus predecesoras, pero sigue conservando esa esencia que tanto gusta a los fans de Litchfield y que, esperemos, sigan preservando en futuras temporadas.

Y sí, esto pasa en la tercera temporada.